Jóvenes chilenas diseñan cargador ecológico para celulares
El aparato se conecta a las plantas y desde allí extrae la energía necesaria para recargar teléfonos móviles u otros artefactos similares
El aparato se conecta a las plantas y desde allí extrae la energía necesaria para recargar teléfonos móviles u otros artefactos similares
El desafío logrado por este equipo de ingenieros y científicos chilenos, confirma que en nuestro país existe capital humano suficiente, para invertir en proyectos relativos a ciencia, investigación y desarrollo
El equipo consta de un sofisticado instrumental de detección de rayos cósmicos, el que es clave en la medición y registro del campo magnético terrestre.
El singular dispositivo de empresas Tesla, no representa una novedad en materia de almacenamiento y suministro energético, pero su anunciada presentación, inaugura el camino de la energía del siglo XXI
El humedal artificial es una opción eficiente como sistema de tratamiento de aguas residuales, pues elimina la presencia de compuestos orgánicos y patógenos, nitrógeno y sólidos suspendidos
En la configuración de hábitats más sustentables, muchos arquitectos y constructores, dirigen su mirada hacia materiales que nos brinda la naturaleza, por la nobleza de su composición
El biogás es producido por ciertos tipos de bacterias metanogénicas, que procesan material orgánico en condiciones anaeróbicas, biodegradándolo. Son parte fundamental de la conversión biogeoquímica del carbono a gas metano
Pese a las barreras de entrada y altos costos en inversión inicial, la energía solar en Chile, ha llegado como solución frente al agotamiento de la actual matriz eléctrica
Se espera que alrededor de 40 empresas, entre nacionales e internacionales, lleguen a la zona, lo que significará la creación de 2 mil empleos en un período de 10 años
Un proyecto que la Universidad de Concepción estuvo desarrollando durante siete años, ya empieza a convertirse en una realidad para la región del Bío Bío. Se trata del Parque Científico y Tecnológico Bío Bío (Pacyt), el cual se encontrará emplazado en los cerros adyacentes al campus de esta casa de estudios superiores.
Con una superficie total de 91 hectáreas, el doble del tamaño que actualmente ocupa el recinto universitario, el emplazamiento contemplará, de acuerdo al bosquejo preliminar, 34 hectáreas intervenidas, 24 de las cuales se destinarán a dependencias de las distintas empresas participantes en la iniciativa. De las restantes 46 hectáreas sin intervenir, 10 serán destinadas a bosque nativo y por último, el trazado urbanístico también incluirá dos lagunas artificiales. Se prevé que los sitios donde se encuentren las instalaciones de las empresas, tengan como promedio 6 mil m2 de superficie.
El financiamiento de la puesta en marcha del proyecto estará a cargo del gobierno regional quien aprobó la suma de $ 12.800 millones para el comienzo de la ejecución de la obra en enero pasado y ya se habla que su materialización constituirá todo un hito dentro de la historia de la institución académica desde su fundación en 1915.
La "tecnópolis", pretende instaurarse como un clúster empresarial dentro de la región, emulando experiencias similares existentes en Estados Unidos, Inglaterra y principalmente España. Se constituirá en un desafío sin precedentes en nuestro país, donde el mundo privado y el académico se darán la mano en pos de la innovación y el desarrollo.
Esta alianza, consiste en una sociedad entre la Universidad de Concepción, que patrocinará la obra y el gobierno regional, quien aportará los recursos estatales destinados a la urbanización del sector, etapa que según estimaciones debiera durar 24 meses.
Una vez concretado el proyecto, se presume que en un lapso de 10 años, el Pacyt podría crear 2.000 puestos de trabajo calificado y altas remuneraciones, que podrían generar ingresos por $ 900 mil millones. Esta suerte de "Silicon Valley" regional, dará cabida a todo tipo de empresas tecnológicas, dentro de las que se pueden considerar las del área informática, farmacéutica, biotecnológica, química fina, energía entre otras. Los requisitos principales que deberán cumplir es que sean intensivas en conocimiento, capaces de crear puestos de trabajo de alta calificación, atraer profesionales a la zona, invertir en investigación y desarrollar políticas de cuidado del medioambiente.
De incorporar los estándares de calidad que exigen las compañías internacionales para expandir sus operaciones en su gestión, este polo de desarrollo, en una primera fase podría reditar hasta $13 por cada peso invertido por el Estado en su puesta en marcha.
Ya exite interés de parte de algunas empresas por instalar sus dependencias en este futuro parque tecnológico. Se proyecta que alrededor de 40 empresas, tanto nacionales como internacionales, podrían funcionar en este recinto.
El primer obstáculo a vencer es crear las herramientas adecuadas que garanticen la implementación de importantes beneficios que incentiven a las empresas a venirse a la región del Bío Bío y romper de ese modo, el elevado centralismo que siempre ha caracterizado a Chile, con un enfoque que menoscaba y posterga el crecimiento en regiones.
En una segunda etapa, desde fines de 2017, las empresas podrán comenzar a construir sus edificios e instalaciones en el parque, el cual estará abierto a todo el público.