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viernes, 19 de abril de 2024 02:52h.

CONSTRUCCIONES CON FARDOS DE PAJA Y TIERRA HúMEDA

Materiales que nos aporta la naturaleza para nuevas soluciones habitacionales

En la configuración de hábitats más sustentables, muchos arquitectos y constructores, dirigen su mirada hacia materiales que nos brinda la naturaleza, por la nobleza de su composición

Geodomus
Una vivienda sustentable construida con fardos de paja

Mejorar la calidad de vida de las comunidades humanas y contribuir a la preservación del equilibrio ecosistémico, a través de la mitigación de la huella del carbono en procesos de diseño, transporte y construcción de viviendas urbanas, semiurbanas y rurales, es el objetivo de recurrir al uso de insumos naturales por su mayor disponibilidad y ahorro térmico. Es la contrarrespuesta a viejos paradigmas y una forma concreta de establecer una cultura basada en el desarrollo sostenible.

Nuestro entrevistado es Oscar Carrillo; arquitecto de profesión,  ecologista por vocación y habitante consciente sobre este planeta. Además pertenece a la organización Manzana Verde, una cooperativa de trabajo que se enfoca en implementar y llevar a cabo proyectos de desarrollo sustentable, donde forma parte del área de Arquitectura y Bioconstrucción. Hace una semana, fue uno de los expositores en el seminario "Tecnologías para un hábitat sustentable" organizado por la propia institución y que se realizó en el auditorio de la Facultad de Arquitectura y Geografía de la Universidad de Concepción.

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Oscar Carrillo, arquitecto

Oscar ¿Cómo surge la idea de volver a materiales elementales en construcción?

Volver a materiales locales, que es la palabra técnicamente más apropiada, tiene que ver con que lo más lógico es que cuando alguien quiera construir, lo haga con materiales que estén a su alcance, o sea que estén situados geográficamente en las cercanías del lugar, por un tema de costos, por un tema de huella ecológica de transporte, etc., y ahora si esos materiales son naturales, tanto mejor, ya que por ejemplo la madera, la paja, la tierra cruda, son materiales muy económicos y se encuentran muy disponibles, entonces ahí la ecuación empieza a ser más perfecta.

¿Existe una normativa vigente en torno a este tipo de construcción y si la hay cuáles son sus principales lineamientos?

Bueno, la normativa que uno debe seguir es la ordenanza general de urbanismo y construcción y la norma chilena de construcción; ese es el reglamento oficial, entonces toda obra debe adecuarse a esas restricciones o a esas obligaciones, y estos biomateriales, como los llamamos, también tienen que regularse por esa normativa, es por eso que nosotros realizamos todo tipo de estudios para poder construir conforme a la legalidad, siguiendo los procedimientos que se especifican.

¿Y en qué consisten esos estudios básicamente?

Los principales estudios son los acústicos, de resistencia al fuego, térmicos y estructurales, son los test más generales que se le deben practicar a una construcción y los más elementales son el térmico y el acústico, que sirven para certificar que lo que se está construyendo va a ser duradero, va a tener resistencia al fuego y que térmicamente va a ser adecuado para el hábitat humano.

Podría pensarse en primera instancia que construir con materiales naturales podría ser una propuesta algo arriesgada, si consideramos que nuestro país es altamente sísmico ¿Qué nos indica el conocimiento técnico para mitigar esa aprehensión?

En primera instancia hay que decir que estructuralmente en todos estos sistemas naturales lo que está probado y archi probado, es que la estructura soportante, la estructura que resiste el sismo es la madera, en torno a eso hay bastante investigación, mucha experimentación, incluso la propia ordenanza general de construcción y urbanismo establece parámetros para construir en madera, por lo tanto se deben seguir esos criterios y uno agrega estos materiales como paja, tierra húmeda, que estructuralmente no modifican la arquitectura de la madera que continúa siendo el verdadero soporte del armazón.

¿Podría considerarse a la estructura en madera como el esqueleto de la construcción?

Claro. La madera es el esqueleto, el relleno es la paja o el cob (tierra húmeda mezclada con paja o fibra vegetal), la piel es el revestimiento en tierra y por último, la dermis es la cal.

En conclusión la estructura de madera es la que debe cumplir la norma sísmica chilena.

Exacto

¿Cuáles son los beneficios concretos de esta forma de construir, de esta propuesta innovadora de construcción?

Nosotros hablamos que esto tiene que aportar beneficios económicos, sociales y medioambientales; este último aspecto es el más importante, ya que sin éste no existen los otros. Es que estamos usando materiales que son de baja, nula o negativa huella de carbono, son materiales locales, por ende no dejan huella de carbono por transporte, son materiales reciclables, son reutilizables, son nobles, medioambientalmente son excelentes. Socialmente hablamos que todos estos materiales son respirables, permiten ambientes saludables, no como el cemento u otros materiales que están asociados a un cierto nivel de toxicidad. Algunos como el asbesto o pinturas con plomo son altamente tóxicos, y por otro lado, construcciones con cemento generan ambientes tan contaminantes que se convierten en reservóreos para virus y bacterias que van a producir alergias, entonces los biomateriales socialmente son muy beneficiosos desde ese punto de vista. Bueno y económicamente, tanto producir estos materiales es económico, construir con estos materiales es económico y a largo plazo, térmicamente hay ahorro en calefacción durante el invierno, en refrigeración durante el verano, entonces por todos lados es positivo.

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Los materia base para construir de manera sustentable están en la naturaleza

 

Si pudiéramos hablar de cifras ¿En cuánto podríamos determinar o evaluar ese ahorro en términos de construcción?

A nivel de economía de construcción; bueno, si es una autoconstrucción sale mucho más económico. Ahora en términos comerciales, construir con fardos de paja y madera es muy similar a construir con madera y con revestimientos tradicionales como yeso cartón, osb, siding o todos esos materiales que hay. Donde están los ahorros principalmente es en el largo plazo, o sea los estudios térmicos que hemos desarrollado nos han permitido determinar que comparativamente, la construcción de madera con fardo es once veces superior que construir con madera y revestimientos tradicionales, es decir, tendríamos un ahorro de once veces en calefacción, o sea en vez de echar diez u once astillas a una estufa a leña, se ocuparía un sólo palo, no es tan exacta la proporción, pero guarda cierta relación con lo que realmente ocurre y nos sirve para tener una idea. Entonces si yo gasto 300 mil pesos mensuales en calefacción por ejemplo, esto se va a reducir drásticamente si habito una vivienda hecha de biomateriales.

¿Cuánto nos falta como país para configurar escenarios urbanos y sobretodo hablando de viviendas, verdaderamente sustentables?

Yo creo que el trabajo de arquitectos, constructores, urbanistas, municipalidades, las universidades, las apuestas por innovación, las empresas constructoras y también la cultura de la gente, o sea, si seguimos siendo convencionales, usando siempre lo mismo y pensando que la construcción con ladrillos y cemento es la mejor, obviamente vamos a seguir con la misma lógica de desarrollo que claramente nos está llevando hacia un abismo económico, social y medioambiental, entonces el cambio cultural, me imagino que tiene que partir de las nuevas generaciones, que somos quienes debemos cambiar ese paradigma de crecimiento que ya no da para más y empezar a mirar al territorio, observar qué tenemos en este territorio y a partir de éste, ver cómo nos podemos alimentar, cómo podemos construir, cómo nos podemos calefaccionar dentro de nuestro territorio, pues, si seguimos importando todo desde China no hay futuro para el ser humano; para el planeta sí, porque la Tierra ha aguantado peores tragedias que el ser humano.

¿Uds. como institución han recibido apoyo o espaldarazos, de otras instituciones, entidades estatales o del sector privado que se hayan interesado por sus propuestas o definitivamente son una voz en el desierto?

Sí por supuesto. Yo creo que existe interés gubernalmental y de las universidades por este tipo de propuestas de desarrollo, porque hay que tener dos dedos de frente para no verlos. En términos de financiamientos por ejemplo, hemos recibido aportes del Ministerio del Medioambiente, de Injuv, de Sercotec, de Innova Bío Bío, de embajadas, y de las universidades, bueno, el que estemos realizando este seminario aquí en la Universidad de Concepción habla de que a nivel académico existe interés y también de parte de la Universidad del Bío Bío hay un interés parecido. Se está preparando el camino para que, para las generaciones siguientes esto sea mucho más fácil, mucho más lógico y más accesible, que el recorrido que estamos transitando todos los que estamos en esto sirva para despejar la ruta a los que vengan después.

¿Están coordinados con Serviu en algunas actividades?

Con Serviu también. Tuve la oportunidad de trabajar en Serviu asi es que nos hicimos muy buenos amigos con varios funcionarios y en torno a ellos estamos trabajando en programas de vivienda social con fardos de paja, o sea tratar de mirar esto primero como una solución para sectores donde la empresa constructora no va porque están muy lejos, refiriéndome a zonas rurales, pensando en este tipo de construcción primero para zonas rurales y luego pensando en esto como una solución para todo ámbito, para todo territorio.

¿Qué ventajas posee una vivienda de estas características frente a una tradicional, específicamente frente a una vivienda de madera?

O sea, con la madera en términos económicos estamos iguales, pero en aspectos térmicos estamos once veces superior. En resistencia al fuego la construcción que nosotros certificamos está en 120 minutos y una vivienda de madera no tiene una resistencia superior a 15 minutos, o sea estamos hablando de una resistencia al fuego ocho veces superior, ocho veces más segura ante la probabilidad de un incendio que una casa de madera, también a lo que me referí anteriormente respecto a la salubridad del ambiente que se genera y además ecológicamente es mejor.

¿Qué mensaje subyace al escoger este camino en la construcción?

Yo creo que la construcción con fardos de paja o con tierra cruda tiene que ver con el cambio de paradigmas que estamos viviendo como sociedad. Es ser bien consciente del estado actual en el que está la sociedad o en que está el ser humano y en base a este panorama que no es tan bueno ni tan auspicioso, ver en esto alternativas de poder decir: sabes, a pesar de ser muy fuerte en la crítica soy muy potente en mi acción. Esto es una suerte de esfuerzo concreto que puede tener cualquier persona y decir sabes que, me molesta como está manejándose el mundo y yo estoy respondiendo de la mejor forma posible. El evitar algún tipo de construcción de tipo tradicional  puede ser una de las principales acciones que uno puede acometer como individuo, es como decir: yo estoy generando un aporte importante a este planeta, porque yo estoy habitando de manera consciente, de manera sustentable, con el mínimo de estrés posible para el planeta y también con beneficios para mí también, porque eso es lo importante que tiene esto, que no es solamente un acto solidario, sino que también obtengo una ganancia en salud, entonces está todo configurado para que sea la solución de este presente futuro, que es futuro, pero que queremos que se haga luego presente para todos, por el bien de todos, de nuestros hijos y por el bien de las generaciones que vienen, porque hemos puesto en riesgo a las nuevas generaciones, hemos puesto en riesgo la salud de nuestros hijos a partir de la forma de habitar que tenemos en estos momentos.

¿Chile está preparado para un cambio en lo que es materia de desarrollo sustentable, un cambio de mentalidad en torno a esta necesidad?

Yo creo que como todo cambio, como todo proceso tiene su tiempo, pero es que tiene que ir hacia allá. No me cabe duda de que en algún momento la mayoría de la población va a tender a vivir de esta forma, en casas con biomateriales, generando su propia energía, preocupándose del tratamiento de sus residuos, sus aguas grises, sus aguas negras, o sea esta es la nueva lógica, soy muy optimista por un lado, entiendo que es un cambio cultural fuerte donde hay muchas personas que no tienen idea de estos temas o cuando sepan de ellos no les va a hacer sentido, porque mientras mayor es una persona más reticente es a los cambios y se concentran en ideas fijas preconcebidas, pero vienen nuevas generaciones, entonces en una o dos generaciones se puede producir un cambio drástico, los cambios no son de la noche a la mañana, pero en cien años podemos vivir un cambio radical en términos de hábitat y calidad de vida. DCC